Puedo escribir los versos más tristes esta noche…
Pero esta noche no estoy tan triste como otras y tampoco soy Neruda.
Esta noche quiero contemplar la belleza en un pequeño momento de libertad, porque la noche me regala eso en su silencio y soledad, que es como una melancolía de existencia.
Ver una mujer hermosa es como mirar las estrellas, no sabes que decir, no tiene explicación.
Solo se quedarme inerte y quisiera poder plasmarlo en lienzos, tomarle fotos a aquel momento para en mi mente mantenerlos un poco mas.
A veces cuando está simplemente no se que decir, mas aun por dentro los sentimientos nacen y quieren salir a toda costa.
Te veo y no te veo, te desapareces en las sombras y solo me dejas un recuerdo.
Te siento pero no te toco, porque tus labios están lejos de los míos.
Me gustaría escribir que tanto te amo o que tanto te quiero, pero el problema es que la realidad que ven mis ojos y no mi corazón me dice lo poco eternas que son las cosas y por eso solo puedo prometerte un amor sincero.
A veces las palabras sobran, pero otras veces las expresiones faltan.
Te veo cuerpo desnudo y recuerdo la inocencia de todo niño y la pregunta infaltable del porque de la ropa, y es en parte esa mascara que todos llevamos, es ese disfraz que nos ponemos día a día y que es un reflejo de la gran hipocresía que vivimos, tal vez pasa tan desapercibida como muchas otras cosas sol porque parecen ser poco importantes.
Y la noche cae como los grandes carean, y tal vez algún día seamos tan honestos por dentro y por fuera para poder ver y mostrar no solo nuestros cuerpos sino nuestras almas sin el temor ni la pena, simplemente con la armonía que la naturaleza tiene.